How are you doing?
Casi en el ecuador del viaje, nos encontramos genial, un poco cansados pero de tantas cosas que hacemos durante el día. Hoy nos lo hemos tomado con calma.
Por la mañana teníamos una visita programada al museo de vuelo de Edimburgo. A las nueve en punto partíamos hacia nuestro destino ya que está a las afueras de la ciudad pues el museo consiste en recorrerse las diferentes exposiciones de aviones importantes de la historia: desde simple aviones de vuelos convencionales hasta aviones de transporte de cargas y militares. Incluso hemos podido observar y tocar misiles de cerca. Los distintos aviones se almacenan en hangares, otros simplemente se alzan sobre los campos de hierba. Pero además, el museo tiene una zona dedicada a la realización de diferentes pruebas para todo turista que lo visite y así determinar si podría ser un buen piloto al mando de una aeronave. ¡Nos lo hemos pasado bomba! Unos destacaban en habilidades físicas, otros en mentales pero fuera cual fuera el resultado, hemos podido apreciar y valorar lo extremadamente complicado que debe ser estar al cargo de una máquina de esas dimensiones.
Terminada la visita volvíamos a la escuela y comíamos allí para coger energías y asistir a las clases y cuando han finalizado nos hemos ido a casa inmediatamente para poder descansar y aprovechar al máximo de lo que nos queda de semana.
Un dato importante es que a pesar que no siempre nos luce un sol a lo largo de todo el día, estamos teniendo mucha suerte porque las temperaturas han subido lo suficiente como para que con estas nubes y claros podamos descansar del sol y la calor de España, que también se agradece, y que ya volveremos a cansarnos de ello en volver. De momento aprovechemos: eso sí, sin ninguna gota de lluvia.
¡Besos!
Lucía